martes, 29 de noviembre de 2016

De homicidios imprudentes

Entre todos la mataron... Qué manida, manoseada si cabe, esta expresión en estos últimos días. Rita Barberá es hallada muerta en su hotel el pasado miércoles. Impresionante la crónica que ofrece el diario El Mundo:


Puesto que el qué, el cómo, el cuándo y el dónde vienen perfectamente detallados en esa crónica, nos queda saber el por qué. Lo más poético que se ha  oído es que murió de pena. Por suerte o desgracia, rompiendo con esa tradición familiar, yo no soy médico, no sé si alguien puede morir de pena. Qué era carne de infarto lo dicen todas las malas (y allegadas) lenguas. Tabaco, obesidad, estrés... Y algunos hablan de depresión. Pues no lo sé, entiendo que sí, que si nadie ha salido a desmentirlo, Rita pudo morir de pena. De todas formas, para ver como media España le quería helar el corazón (que diría Machado el bueno, o el malo, o el que sea), quizás lo que le pasó es que le flaquearon las fuerzas para seguir luchando.

Si viviéramos en los años 50, no hubiera salido de España y las noticias del extranjero nos llegaran con cuentagotas y a base de NO-DO diría que España es un país de malnacidos, hijos de 1000 padres, bastardos, obsesos, hipócritas, demagogos y en definitiva de macabros hijos de puta. Como estamos en el 2016, con la globalización en todo su apogeo, les tranquilizará saber que no es solamente una condición del españolito de a pie. No obstante, desearle la muerte a alguien en pleno siglo XXI no puede recibir mejores calificativos. Encima hacerlo por simple ideología política me parece caer míseramente a lo mas hondo de las cloacas de la condición humana. Por qué si no fuera por ideología política posiblemente le habrían deseado la muerte a Leo Messi o a Jordi Pujol que en cuanto a dinero se refiere tienen bastante más que justificar que Rita Barberá (si es que finalmente un juez demostrase que lo tenía que hacer). En el caso de que también le deseen la muerte a esas personas, estaríamos ya hablando de enfermedad mental, por lo que, por favor, omitan que han leído este párrafo.

Sobre el espectáculo festivo-cultural de la agrupación de Unidos Podemos en el congreso, que no así en el senado y ni siquiera en el Ayuntamiento de Valencia por el grupo Compromis: 


No creo que mi percepción haya cambiado mucho desde mis primeros post hace ya año y medio. Me remito a ellos para verificar a) que mi posición no ha cambiado, b) que la suya tampoco, c) que la de sus votantes, sorprendente y amargamente tampoco. Algunos de mis posts más queridos:



Sin animo de ofender a nadie a mi esto me recuerdo cuando empezaban Compañeros o Física o Química (esta segunda la vi menos, gracias a Dios), donde los actores eran malos de solemnidad y si apartabas la vista de la televisión no diferenciabas a unos de otros porque eran calcos. Sin ánimo de ofender a los actores quería decir, que eran jóvenes e inexpertos. Estos actores de ahora saben perfectamente lo que hacen. Si no se hubiera muerto justamente esta semana uno de los dictadores más sanguinarios que ha parido madre a alguno le quedaría el beneficio de la duda, después de ver las loas y alabanzas de todos el grupo de Unidos Podemos, por desgracia, algunos se lo seguirán dando. Como consuelo quedará ver como hay gente que perdió a su familia, amigos, su vida, su hogar, todo por los caprichos personales de una persona, y ni siquiera le desean la muerte...



Volviendo al meollo Rita, después de todo este circunloquio, ¿quien mató a Rita? Efectivamente, murió sola. Algunos apuntan a Ciudadanos. Estos solo pidieron el apartar de la vida política a los imputados, cosa que no debería ser tan grave si la política fuera el arte de servir, y no el de mandar. Exculpados. Los polluelos del PP (Casado, Maroto, Maillo, Javier Arenas) (Ah no, este último no), cargaron contra Rita, quizás se equivocaron en las formas, pero clamaban por lo que el 90 % de los votantes del PP quieren, renovación. Y porque ellos, que son los de la renovación, no carguen con lo que han hecho (tanto para bien como para mal) los que estaban antes que ellos. Exculpados. Solo queda uno, las huellas apuntan hacia los que ahora salen colgándose la medalla de ser amiguísimos de Rita. Hernando, con la boca tan grande que tú tienes, ¿cómo que no la defendiste antes?. Idem sr. Margallo. Aznar entre aplausos. Si no se hubiera muerto Rita, ¿Habría aparecido para que le aplaudieran los votantes valencianos?. Mariano. Ay Mariano. ¿qué tan importante era Rita, para después de una vida entera en política, tuviera que ir al cementerio de elefantes del Senado?. Pero los peores, con diferencia, todos y cada uno de los que ahora lloran a Rita, hipócritas, que callabais cuando entre todos la estaban matando. Y ella sola se murió.



Buena semana. Sos quiere. PN. 




jueves, 10 de noviembre de 2016

De la necedad

Hace ya casi año y medio, cuando era prolífico por estos territorios, fundamentalmente porque tenía más tiempo (y sobre todo ganas) que ahora, le dedicaba una entrada a mi abuelo paterno, al que adoraba. A mi abuelo materno, con el que, la verdad, compartí menos tiempo, con el paso del tiempo le he conseguido reconocer virtudes que cuando falleció, debido a mi temprana edad, era dificil percibir. La mejor cualidad que tenía era el silencio. Pues vaya cualidad, dirán algunos. Sí, el silencio, cuando se callan segun qué cosas, es una cualidad.

No hace mucho que vi un video en youtube de Sabina (hoy tendré que acabar con alguna canción suya, ¡qué remedio!) con Pérez Reverte. Lo posteo para curiosos.


En el, como si de amigos de toda la vida fueran, hablan de lo divino y lo humano. Pero si tengo que hablar de una parte en concreto, la que más me ha gustado y que viene al pelo de este post, es cuando le pregunta el periodista-novelista al cantante-poeta qué es lo que más detesta en el mundo. El primero dice que es intolerante a la estupidez. Yo hasta ahora cuando iba a Mercadona compraba leche sin lactosa, por esta graciosa intolerancia que se ha puesto de moda. Tengo que mirar a ver si en este supermercado, famoso por su lucha contra el gluten, la lactosa y algun que otro alergeno, venden algo también contra la estupidez. Sabina añade el sectarismo y los que estan seguros de todo, sumandole además los que tienen un autoestima tal que dicen "es que tengo que ser yo mismo". Uno, que esta de acuerdo con todo ello, tiene ganas de hablar, de entrar en una discusión con dos personas a las que admira por diferentes aspectos de su vida (aunque pueda no estar de acuerdo en otros), y de decir que no solo tiene intolerancia al estupido, sino mucho más al que siendo estupido cree que lo sabe todo.

Y ¿por qué esto hoy? Pues por dos razones. Dos. (Los taurinos lo entenderán, los que no, me odiarán, porque en este santo pais se odia lo que no se entiende).

La primera es que Donald Trump ha ganado las elecciones a Presidente de los Estados Unidos de Norteamerica. Y como si todos supieramos de qué estamos hablando, todos odiamos a Trump, ridiculizamos lo que han votado los Americanos (a ver si despues de llevar votando más de 200 años le van pillando el tranquillo... ya les vale...) o los comparamos con los españoles y la elección (a toda luz antidemocrática...) de Rajoy. De repente, lo que todos los analistas internacionales no han sido capaz de ver, Twitter y un español con una cerveza en la mano lo han sabido desmigar en un par de frases contundentes, de las de esto es así y punto que decía Sabina en el video. ¡Olé!


En los meses que viví en los USA sobre todo aprendí a no juzgar al otro. Cada día veía cosas a las que no estaba costumbrado, pero aprendes que en un pais con tanta variedad de culturas, etnias, religiones, es imposible comprender que mueven a cada persona a actuar de un modo u otro. Tratar a los votantes americanos como números (vease el voto latino, el voto femenino, el voto negro) en este ejercicio estadístico fácilmente da al traste cuando los que votan son personas (y sus circustancias) y no números. Ponernos a juzgar por que alguien ha votado a Podemos o a Vox me resulta ridiculo cuando desconocemos las circunstancias personales de alguien. Ponernos a hacerlo de gente y de partidos que solo hemos visto en pinceladas en televisión me parece osado e incluso ofensivo (a la inteligencia humana, obviamente). Yo me he limitado a preguntar a un buen puñado de amigos que tengo allí, a leer o escuchar a analistas de lo que puede o no puede pasar, a ver el primer discurso del ya presidente electo y al final a sacar mis propias consecuencias, que como son pobres me guardo para mi y para quien me pregunte.

Como conclusión más general diría lo que ya le he oido a Rosa Diez (UPD o lo que sea ya) alguna vez; que no nos vendría mal tener una educación política desde temprana edad. Y yo añado, de economía. Y viendo una de estas sentencias en redes sociales también añado: con tener educación valdría...


 La segunda razón por laque escribo hoy es porque he tenido la suerte de asistir a una conferencia de Javier Manterola. Para los que no le conozcan, el mejor ingeniero estructural español vivo. Y la agradable sorpresa que lo que más he aprendido hoy con él no ha sido de puentes (apenas se habrá enseñado 5 diapositivas de sus puentes), lo mejor ha sido su frase final:

"Cuando hagáis cosas sabed, sabed, que yo ya soy muy viejo y aun me quedan por saber muchas cosas."



 Si alguien que bate el record del mundo de luz de un puente atirantado con el puente del embalse de Barrios de Luna te dice que le quedan muchas cosas por saber, por favor, sabed y luego hablad.

 A ti, te estoy hablando a ti, que nunca sigues mis consejos.


Buen fin de semana a casi todos. Sos quiero. PN